sábado, mayo 29, 2004

DESTINOS - CAPITULO DIEZ - PARTE 5

Siento que naufrago. Sin dinero ni trabajo, no encuentro cómo reaccionar. Solo quiero vegetar hasta que el mundo acabe.
Me estoy quedando así sin energías, porque solo vivo pensando cómo acercarme a un simple hombre.
A veces, muy lejos y de vez en cuando, pienso que tengo que acabar con eso, porque mi destino está por ahí. Quiero ir a Ibiza, a PArís, a Suiza. Así embelesada como estoy, solo pienso en morir de inanición para que la condena se acabe.
Ojos-de-bruma, qué me hiciste?
Estoy peor que nunca. Quiero ser libre! Tengo que acabar el libro. Me lo prometí por el escultor y la cantante. Por demostrarles que puedo; solo debía quererlo.

Unas cuantas páginas me separan de correr a la máquina de escribir.
Santa Bonnie Favelis dame coraje.

Apuntálenme todos los qu saben cómo necesito tener un punto de referencia mío propio. Algo que haya hecho solo por mí y para mí.
Algo que pueda dejar a mis hijas para que entiendan mis desatinos, mi miseria.
Algo que me de valor ante mis ojos; que presione mi coraje de hablar sin careta.
Ya sé que van a empezar a joder con lo de siempre. Que tngo que quererme más. Minga! Me adoro! Sólo que no consigo mostrar quién soy.
Dejen de enfermarme con consejos que saben que no voy a seguir.
Yo sé que soy buena, genial, divertida o seria, pero quiero que los demás lo tengan claro.
Si al menos una persona en el mundo se acercara y me dijera que me entiende, yo sería feliz.

No hay comentarios.: