SEXO - CAPITULO NUEVE - PARTE 1

12-07-94: Hoy ya tengo treinta y nueve años; me la creo, totalmente, que soy "casi" perfecta, pero estoy sola.
Eso no sería malo si no fuera que no quiero estarlo.
Mis amigos me miran con infinita compasión, porque saben que no lo resuelvo con sexo. Si fuera tan fácil, ya estaría en la cama de ojos-profundos, refregandome como gata en celo.
Hay montañas de camas por ahí, esperando convidantes. Sólo elegir.
Hay también un par de amigotes que siempre estuvieron como en el cuento de la zorra y el cuervo, esperando que caiga alguna uva. Pero jamás transé porque sí.
Siempre hubo algún sentimiento en el medio. Por supuesto que como crédula que soy, caí en algunas trampas. La última, no hace mucho.
Jodete! No querés elegir. Te soplan la nuquita y como estás anafectiva (lo dice Salvatore, mi amigo psiquiatra) te entregás. Y hay miles de mercenarios procurando una guerra cuerpo a cuerpo.
Antes de c...(hacer el amor), AC (que no es antes de Cristo) son serafines y DC, después de, sos una "zonzita" entre las mil y quinientas que adornan las cachas de su pistola. O quieren hembra o quieren mamá, o casa o comida o ....mèrde! nada que tenga que ver con hacer el amor.
AC, se arrancan las vestiduras por la supuesta pasión que los inflama y lastima. DC, se c... en mi. Agreden, ironizan, se pavonean con otras en mi cara o juran que fue un error y solo querían amistad.
Yo sé que me comporto como una cínica a veces, delante de mis amigos. Les digo que me harté de Fulano, o que Mengano es ridículo porque me persigue. O les digo que quiero alguien cerca y ni me importa quién. O que voy a experimentar tener sexo sin amar.
Menos mal que no me creen. Saben que tienen que reemplazar la palabra "harta" por "dolida". Que el alguien puede ser solamente un amigo y que lo del sexo es solo una amenaza que estaría dispuesta a cumplir si me reportara unos minutos de felicidad.
Yo sé que estoy así porque es cuarto menguante y empiezo a analizar hasta los bostezos.